18 de febrero del 2010

Ya estamos a jueves. Apenas me ha costado levantarme, pero había que ir a trabajar. Qué ganas de jubilarme tengo.

Al mediodía salgo a entrenar por fin. Tengo muchas ganas. Entro en la piscina, le doy al cronómetro y empiezo a nadar.

Llevo una semana exacta sin nadar y lo noto. No voy muy bien de sensaciones pero no pasa nada. Sigo nadando.

Empiezo a sospechar de que pasa algo. Lo normal es que deje a todos detrás enseguida, a los de las calles de los lados, a los de mi calle, etc, pero hoy, no me despego e incluso algunos me aguantan, en cuanto veo el crono al hacer el 500m me empiezo a dar cuenta. Voy muy lento o no voy fino. Estoy nadando a 2min/100m, muy lento para mi.

Me convezco que será por estar una semana sin hacer natación pero que seguro que el segundo 500 cambia la cosa.

Llego al 1.000m y lo mismo. No puede ser. No entiendo lo que pasa. No tengo sensación de estar cansado y además, estoy con buena técnica. No lo entiendo.

Paso el 1.500m y lo mismo. Trato de acelerar, haciendo una brazada más por largo pero nada, incluso peor.

Al final, consigo nadar 2.000m en 40min 06sg, a un promedio de 2min/100m sin encontrarme cansado, simplemente, que no voy. Al menos, he entrenado.

Casualmente, leyendo el blog de Jaime Menendez, "TriLuarca", he leído el de su tocayo Jaime Vigaray y me ha gustado unas palabras escritas en su blog, las cuales me permito sin haber preguntado, el copiar y pegar en mi blog:

"Cuando caigas levántate". No olvides que siempre es bueno caer para no olvidar que aún estas vivo.

El día que necesites motivarte piensa que en el camino a veces hay que parar , sólo así llegarás más lejos.